martes, 25 de octubre de 2016

CAMPA DE LAS LLANAS Y BERRETIN

                         



Como un domingo más me cuesta abrir los ojos a estas horas tan tempranas. Se nota el cansancio acumulado de la semana. Pero las ganas pueden más que la pereza y me pongo en marcha con la seguridad de que va a ser un buen día ya que hacía mucho tiempo que no iba a Berretín.

Son las 8 de la mañana en la gasolinera de Abetxuko y allí nos encontramos Raúl, Jesús y el que suscribe, Josu. Con un frío del carajo nos ponemos en marcha hacia Etxabarri-Ibiña. Parcelerias y bastante carretera hasta llegar a Aiurdín. Allí por fín cojemos un sendero que nos conduciría hasta la cima. Por cierto, por el camino había una buena cantidad de hongo. Una bonita foto como recuerdo con la ermita de Oro sobresaliendo de entre la niebla. De allí rumbo a Zárate, y tras pasar la verja comienza la subida hasta la campa de las Llanas. Nos cruzamos con un grupo de seteros que llevaban las cestas más vacías que la tripa de Carpanta. Y después de unos minutos de subida llegamos al mojón de las Llanas. Otra fotito como testimonio y proseguimos la marcha hacia las rampas de Pagazuri donde el track nos desvía hacia la izquierda para comenzar a subir a Berretín. Rampas duras, duras….y camino de cabras. El día va mejorando rápido al igual que la temperatura. Así que nos quitamos una capita de cebolla a mitad de ascenso. No recordaba esas peaaaaazo rampas , pero lo subimos. Llegamos al buzón y decidimos tomarnos un refrigerio. Barritas y platanitos para unos…..y bokata con cervecita para algún otro. Sin mariconadas. Hace días ya que veo el 7 en mi báscula. No hay miedo.

Después de unas nuevas fotos comenzamos el descenso…….y me gustaría encontrar las palabras necesarias para definir la pasada de descenso que es Berretin. Enseguida coges confianza y te olvidas de los peligros de la mezcla velocidad-senda. Que pasada, como disfrutamos de la bajada. Rápida, larga y en algún tramo con cierto peligro. Algún matorral de más de una curva fue testigo de mi presencia. Pero sin miramiento sigo bajando. En cierto tramo oigo chasquidos de ramas a un lado del camino, durante más de cien metros, pero no consigo saber que es porque no puedo apartar la mirada del camino. Y de repente me sale un cervatillo a toda velocidad dándome un susto de la pera. Sin duda corren más que nosotros.

Terminamos el descenso llegando a Markina. De allí a Murgía y vuelta Aiurdín por carretera. Tramo más que aburrido. Y de allí hasta Vitoria parcelarias por Apodaka y Foronda. Un par de cevecitas en el bar de Abetxuko acompañando una bravas y para casita con el deber cumplido.

De nuevo un placer con esta gente.
NO PAIN……..NO GLORY

Fotos:

https://goo.gl/photos/9Yi9xeLDXdVkh6Tc8

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